Colombia confirma los contactos con 'Alfonso Cano', el nuevo líder de las FARC

El dirigente comunista y director del semanario Voz, Carlos Lozano, ha confirmado que ya existen contactos con el nuevo máximo comandante de las FARC, 'Alfonso Cano', en busca de acercamientos para negociar un canje de rehenes por guerrilleros presos.

El periodista, una de las personas que tiene comunicación con la comandancia rebelde, señaló en una entrevista que se buscó establecer un primer contacto con 'Cano', alias de Guillermo León Saenz, por distintas vías y que todo va "por buen camino".

Lozano dijo que junto al ex ministro Alvaro Leyva, autorizados por el presidente colombiano, Álvaro Uribe, para buscar una comunicación directa con las FARC que permita avanzar en la búsqueda de un acuerdo humanitario, acordaron hace poco establecer contactos con el nuevo jefe rebelde.

"Conocida la muerte de 'Manuel Maruralda' convinimos hacerlo un poco dirigido hacia el nuevo jefe de las FARC, que como se conoce es 'Alfonso Cano' (...) y puedo decir que todo va bien", precisó.

Lozano aseguró que todas las comunicaciones se han mantenido de manera "discreta" y "prudente", y que el trabajo se ha hecho de forma coordinada con el grupo de países amigos (España, Francia y Suiza).

"No me atrevo a decir más allá que ya hay un contacto abierto, pero sí les puedo asegurar que todo va por buen camino y ya hay unas vías de comunicación", agregó.

Atender la ayuda exterior

El dirigente del Partido Comunista Colombiano (PCC) pidió no excluir la ayuda que ofrecen otras personas o Gobiernos como el del presidente venezolano, Hugo Chávez, y la senadora de oposición Piedad Córdoba, a quienes las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) entregaron seis rehenes a principios de año.

Por su parte, el ministro de Interior y Justicia, Carlos Holguín, confirmó que Leyva y Lozano aún tienen la autorización que el Gobierno les dio a principios de mayo para buscar una comunicación directa con las FARC en busca de una acuerdo humanitario.

El fundador y líder máximo de las FARC, Pedro Antonio Marín, alias "Manuel Marulanda Vélez" o "Tirofijo", murió de una crisis cardíaca, según el mando central rebelde, y en su reemplazo fue nombrado 'Alfonso Cano'.

Las FARC tienen en su poder un grupo de 40 secuestrados (entre ellos Ingrid Betancourt y tres estadounidenses) a los que pretenden canjear por unos 500 insurgentes presos, tres de ellos extraditados a Estados Unidos.