[OPINIÓN] Fernando Cillóniz: “Se empobrecen los peruanos... pero se enriquece el Estado”. (Foto: Andina)
[OPINIÓN] Fernando Cillóniz: “Se empobrecen los peruanos... pero se enriquece el Estado”. (Foto: Andina)

La economía debe crecer por encima de 4% anual para que los peruanos pobres dejen de serlo. La única forma de reducir la pobreza es mediante el crecimiento económico. ¡No hay otra!

Si la economía creciera 2% o 3% anual, todo seguiría tal cual. El número de pobres se mantendría estable. No aumentaría, pero tampoco disminuiría. Por ello, es muy malo que la economía crezca 1%, 0%... o decrezca. En ese caso, más peruanos pasarían a ser pobres.

Bueno pues, durante los últimos 10 años, nuestra economía estuvo trabada. Creció, pero poco. Este 2023 está acabando mal. Incluso, peor que los últimos años. Por ello, más peruanos pasarán a ser pobres. Muchos –sobre todo, jóvenes– no encontrarán trabajo formal. Habrá más informalidad laboral y más ambulantes en las calles. Crecerá la delincuencia y se reavivarán los conflictos sociales. Proliferarán –más aún– las ollas comunes y los mendigos con criaturitas a cuestas.

Sin embargo, el gobierno –muy suelto de huesos– anuncia un incremento de 12% en el presupuesto público para 2024. El presupuesto pasará de S/214 mil millones en 2023 a S/241 mil millones el próximo año.

Claramente, el gobierno está en otra. No tiene idea de los padecimientos de nuestra población. ¿Cómo se les ocurre aumentar el presupuesto, tan por encima del crecimiento de la economía? O sea, más plata para los ministerios, más plata para los gobiernos regionales y municipales. Más plata para las instituciones que todos los años aparecen liderando el ranking de la corrupción en el Estado. ¡Qué tienen en la cabeza!

El sentido común aconseja todo lo contrario. Lo sensato sería reducir la burocracia parasitaria que nos maltrata y extorsiona sin piedad. Fusionar, absorber o disolver instituciones redundantes y corruptas.

Pero no. Lejos de reducirse y hacerse más eficientes, no se les ocurre mejor idea que aumentar el presupuesto público. O sea, más burocracia, más redundancia, más corrupción.

El estatismo se sirve del pueblo, en vez de servirlo, como es su deber. Es el mundo al revés. Al estatismo le importa un bledo empobrecer a la población… lo único que le importa es enriquecer el Estado.

Eliminar burocracias estatales inoperantes y corruptas. Eso es lo que se necesita. Reducir el gasto público a lo estrictamente necesario: agua, salud, educación, seguridad, justicia. Rebajar las tasas tributarias para que la plata esté más en el mercado y menos en el Estado… para que haya más trabajo y bienestar para nuestra población.

¡Ese debería ser el camino!