Miles de litros de relave minero contaminan el río Mantaro
Miles de litros de relave minero contaminan el río Mantaro

Los pobladores del distrito de San Pedro de Coris, en Huancavelica, han sido afectados por los desechos tóxicos y residuos minerales que cayeron al río Mantaro, de parte de la minería.

De acuerdo al reportaje de Cuarto Poder, el río Mantaro es la principal fuente de recurso natural de la comunidad de Expansión, ya que los pobladores utilizan el agua para regar sus chacras. Pero sus aguas han sido contaminadas con metales pesados de la minera Cobriza que está ubicada en el distrito de San Pedro de Coris en Huancavelica. En la parte baja del mencionado distrito se encuentra los relaves de la mina Cobriza en inmensos contenedores llenos de material tóxico. Gran parte de este relave cayó al río Mantaro.

Una de las fosas de relave colapsó y generó un tremendo forado. La falta de mantenimiento de los pozos hizo que se rompiera uno de ellos. Por ese forado salió todo el relave. Primero sepultó por completo la subestación eléctrica de la misma planta y luego dejó sin luz a toda la población de Expansión. El relave siguió su camino repleto de metales pesados.

El relave no llegó a la población y se desvió hacia el abismo. 67 mil metros cúbicos de relave terminaron afectando la tierra y el río Mantaro.

Según el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA), 37 000 metros cúbicos de relave cayeron directamente al río Mantaro, esto equivale a haber arrojado 425 000 barriles repletos de relave directamente al río.

“Para ahorrarse costos, muchas veces las empresas no buscan la mejor ubicación de las presas de relaves, sino buscan lugares más próximos posibles a la planta de procesamiento. Y por eso tenemos en muchos casos, varias minas en el país que los relaves se ubican en las zonas que por costos económicos de repente son más interesantes para las empresas, pero en términos de protección ambiental no son las más adecuadas”,comentó José de Echave, especialista en temas ambientales.

Expansión es una pequeña comunidad que subsiste por la presencia de la minera Cobriza. Tras la contaminación de su río por parte de la minera, los pobladores están en medio de la incertidumbre pues si la empresa no trabaja no tiene ingresos.

La alcaldesa de San Pedro de Coris, Yannet Meza, manifestó su postura respecto a la contaminación del río Mantaro: “Nosotros estamos a favor de la mina y no somos antimineros. Nosotros queremos inversión privada, pero que sea responsable con las comunidades, con sus trabajadores y con el cuidado del medio ambiente, eso es lo que nosotros exigimos”.

Cobriza pertenece al complejo metalúrgico de Doe Run, una empresa en proceso de venta. Este problema ha llevado que Cobriza tenga limitaciones en el mantenimiento de sus plantas. Según la OEFA, desde el 2011 a la fecha Doe Run ha recibido multas por incumplir normas de protección ambiental, por incumplir los límites máximos permitidos, por incumplir normas de residuos sólidos, entre otros.